UNMDP > Facultad de Humanidades > Publicaciones > Revistas

 

Pasado Abierto - Año de inicio: 2015 - Periodicidad: 2 por año
https://fh.mdp.edu.ar/revistas/index.php/pasadoabierto - ISSN 2451-6961 (en línea)

Sistemas de estratificación, migraciones y desarrollo en las publicaciones del Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche (1967-1973)

Hernán Comastri

Universidad de Buenos Aires, Universidad Torcuato Di Tella, Argentina

hernancomastri@gmail.com

Recibido: 11/03/2020        

Aceptado: 29/05/2020

Resumen

Las investigaciones llevadas adelante por el Departamento de Sociología (DS) de la Fundación Bariloche entre 1967 y 1973 muestran una vocación por el trabajo multidisciplinar y atento al “juego de escalas”, y un compromiso con algunas de las temáticas más acuciantes para las ciencias sociales de esos años: el desarrollo, la desigualdad, las migraciones, la inestabilidad política, las ideologías, el impacto social de los medios masivos de comunicación, etc. Este primer acercamiento a las publicaciones del DS busca ofrecer una reconstrucción, de carácter exploratorio, del proyecto intelectual de la institución. Para ello, se trabaja con una selección de textos publicados por el DS que da cuenta de los intereses, preocupaciones y perspectivas de sus miembros, así como de las características generales de esta producción, que la convierten en un aporte singular dentro del campo de las ciencias sociales de la época.

Palabras clave: Fundación Bariloche, historia de las ciencias sociales, sociología del desarrollo, migraciones.

Stratification systems, migrations and development in the publications of the Department of Sociology of the Bariloche Foundation (1967-1973)

Abstract

The investigations carried out by the Department of Sociology (DS) of the Bariloche Foundation between 1967 and 1973 show a vocation for multidisciplinary work and attentive to the "game of scales", and a commitment to some of the most pressing issues for the social sciences of those years: development, inequality, migration, political instability, ideologies, the social impact of the mass media, etc. This first approach to DS publications seeks to offer an exploratory reconstruction of the institution's intellectual project. To do this, we work with a selection of texts published by the DS that accounts for the interests, concerns and perspectives of its members, as well as the general characteristics of this production, which make it a unique contribution within the field of social sciences of the time.

Keywords: Bariloche Foundation, history of the social sciences, development sociology, migrations

        


Sistemas de estratificación, migraciones y desarrollo en las publicaciones del Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche (1967-1973)

Introducción

Este artículo tiene por objeto presentar, describir y analizar el archivo de publicaciones del Departamento de Sociología (DS) de la Fundación Bariloche (FB), cuyo acervo documental ofrece un punto de entrada privilegiado para la reconstrucción de un aporte específico y significativo a las agendas de investigación de la sociología argentina de las décadas del sesenta y el setenta. Siendo un primer acercamiento a la temática y a un archivo aún no explotado desde esta perspectiva de análisis, el presente trabajo tiene un carácter principalmente exploratorio. De las más de cien publicaciones del DS hoy disponibles en la biblioteca de la FB,[1] se ha seleccionado, con un criterio temático, un conjunto de veinte trabajos que permiten delinear algunos de los trazos generales del proyecto intelectual del Departamento. Si bien los intereses de los investigadores del DS son múltiples y muy variados,[2] las publicaciones seleccionadas apuntan a reconstruir lo que sus autores llamaron una "sociología del desarrollo", sus estructuras, desafíos y escalas de análisis. El recorte temporal realizado en esta selección, por su parte, ubica un momento inicial en la fundación misma del DS en 1967, y un corte final en la creación, dentro de la propia FB, del Centro de Estudio de Población, que en 1974 pasaría a absorber muchas de las líneas de investigación que se desarrollarán en las próximas páginas.[3]

La aproximación particular de este artículo al archivo del DS surge de un interés por observar la institucionalización de espacios y tradiciones intelectuales en la Argentina de la segunda mitad del siglo XX. Más concretamente, en trabajos previos (Comastri, 2014) se ha avanzado en la reconstrucción del entramado de instituciones de ciencia y tecnología surgidas alrededor de la ciudad de Bariloche (con el Centro Atómico Bariloche como institución pionera, de la que progresivamente se desprenderían otras, incluyendo la FB), su inserción en debates y redes intelectuales de carácter transnacional y su vocación latinoamericana. De cualquier manera, los interrogantes presentes en el análisis que se ensayará a continuación surgen y cruzan distintos campos disciplinares, que permiten un abordaje del análisis de fuentes desde distintas perspectivas complementarias. Entre ellos podrían mencionarse los estudios sobre historia de la ciencia y la tecnología en Argentina y América Latina (Hurtado, 2010; Feld, 2015; Bianculli y Vercelli, 2019)[4] y sobre ciencias sociales, saber experto e intelectuales (Neiburg y Plotkin, 2004; Blanco, 2006; Altamirano, 2013; Ansaldi, 2014), así como aquellos estudios que abordan la relación del saber científico con el Estado (Plotkin y Zimmermann, 2012; Bohoslavsky, 2015; Di Liscia y Soprano, 2017) y con los espacios universitarios (Suasnábar, 2004; Califa, 2011; Bozza, 2014).

Si los aportes del DS pueden integrarse a discusiones más amplias sobre el desarrollo científico, económico y social en la Argentina, la producción que se analizará en estas páginas excede el mero contexto nacional, ya que tanto en sus objetivos declarados como en sus prácticas efectivas las producciones del DS supieron integrar las variables locales a la región latinoamericana y a la situación global en su conjunto. Este desborde de los límites nacionales del proyecto intelectual del Departamento puede observarse también en su política de colaboración, intercambio e inserción internacional. El juego de escalas entre lo local, lo nacional, lo latinoamericano y lo global, implícito en esta metodología de trabajo, representa un aporte multidisciplinar del DS a los debates de las ciencias sociales que le eran contemporáneos y ofrece respuestas renovadas a los mismos. Un claro ejemplo de este aporte lo representa el estudio del fenómeno de las migraciones, que tendrá un lugar destacado en la agenda de investigaciones del DS.

En las próximas páginas, por lo tanto, se buscará recuperar la especificidad del proyecto intelectual del DS, que para comienzos de la década del setenta se había dado una voz propia en los debates sobre el desarrollo, las relaciones internacionales, la planificación regional y otros temas vinculados. Justamente por participar de esta variedad de debates es que la actuación del DS puede ser potencialmente apropiada por muy diversos campos de investigación, desde la historia de la planificación hasta la historia disciplinar de sociología en la Argentina, pasando por estudios específicos sobre educación, migraciones internas e ideología. Aunque el foco del presente trabajo estará puesto en describir y analizar la producción del DS en sí misma, los mencionados cruces serán muy sintéticamente abordados a lo largo del mismo, dejando para futuras investigaciones un análisis en mayor profundidad sobre las formas particulares de inserción de cada investigación del DS en su respectivo campo disciplinar y momento de producción. Por el momento, se realizará simplemente una reconstrucción de algunas de las líneas generales que pueden observarse en el conjunto de dicha producción.

Para ello, se avanzará primero en una muy breve reconstrucción del proyecto institucional e intelectual del DS, deteniéndonos en el contexto específico en el que el mismo es fundado, sus objetivos explícitos y colaboradores, su relación con el conjunto de la FB y su inserción en una red de instituciones y proyectos de la Argentina y el extranjero. A continuación, se estudiará el juego de escalas ensayado por los investigadores del DS en sus diferentes "sistemas de estratificación" (global, latinoamericano, nacional y local), observando las especificidades que se señalan para el caso argentino y para algunas unidades subnacionales, como puede ser el caso de la provincia de Tucumán. Y por último, se abordará el tema de las migraciones, tanto internas como internacionales (concentradas en este último caso principalmente en la emigración de científicos de la Argentina), su impacto en las posibilidades de desarrollo de las economías emisoras y receptoras, su historia dentro del desarrollo de la sociología como una disciplina profesional en el país y el aporte disciplinar que el DS busca hacer a través del estudio de la relación entre educación, ideología y "potencial desarrollista" del migrante.  

Información estadística, territorio y planificación

El DS fue creado en 1967, cuatro años después de la fundación de la FB y en un período de relativo crecimiento institucional que cerraría en 1972/73, con una nueva crisis de financiamiento y un cambio en el contexto político causados por el ascenso de Cámpora a la presidencia.[5] Los motivos detrás de su creación se vinculan con la necesidad de complementar la actividad del resto de la FB con un trabajo que desde su misma concepción se había definido como necesariamente multidisciplinario. Por otra parte, la necesidad de contar con un instituto de excelencia para la investigación sociológica en el país partía también de lo que se evaluaba como una "deficiente" formación de los sociólogos en las universidades del país[6]  y de la necesidad de "satisfacer las necesidades internas del país en materia de conocimientos sociológicos, hacer contribuciones a la ciencia en términos universales (es decir, una producción 'exportable'), y formar sociólogos investigadores en condiciones de competir en el mercado internacional".[7] Esta preocupación por vincular el contexto argentino con la producción "universal" es, como se verá en las próximas páginas, uno de las ideas-fuerza centrales para la producción del DS en este período.

El eje central de las investigaciones del DS giró en torno a su programa de investigación básica y, aunque la distinción no es tajante ni excluyente, sólo posteriormente se definirían investigaciones "aplicadas" en función de las demandas de la sociedad[8] y de las necesidades intrínsecas de los propios proyectos básicos. Los criterios de selección de los problemas a abordar y los recursos a volcar en esta investigación básica referían siempre a la relevancia social de los mismos, mientras que el programa tenía como "ambición última" la construcción de conocimiento universal desde la especificidad social y económica local como paso previo a la elaboración de políticas públicas y la "formulación de nuevas metas para las sociedades en desarrollo".[9] Así, el DS definía a la "sociología del desarrollo" (entendida en un sentido amplio) como el área en la que se concentrarían sus mayores esfuerzos.

En el ejercicio 1970/1971, esta área se dividía en siete grandes programas de investigación: Migraciones internas y desarrollo regional (dirigido por Nilda Sito); Modelos y métodos matemáticos (dirigido por Raúl Hernández); Emigración y retorno de científicos (dirigido por Manuel Mora y Araujo); Bases para un programa de desarrollo comunitario en Santiago del Estero (dirigido por Jorge Schnitman y M. Mora y Araujo); Desocupación y emigración en áreas deprimidas de Santiago del Estero (dirigido por Susana Rodríguez Conrad y M. Mora y Araujo); Estructura social y ocupacional del Alto Valle del Río Negro (realizado en colaboración con el Centro de Investigaciones Científicas de la provincia de Río Negro), y Recopilación sistemática de datos societales (en colaboración con el Instituto Di Tella, el Institute for Social Research de la Universidad de Michigan y el Harvard Population Studies Center).[10] Para llevar adelante dichos proyectos, en ese mismo ejercicio 1970/1971 el DS contaba con 21 "profesionales de las ciencias sociales" y manejaba un presupuesto superior a los U$S 200.000, U$S 60.000 de los cuales provenían de contratos externos.[11]

En la organización de las investigaciones del DS destacan desde el comienzo las colaboraciones internacionales. Además de las instituciones extranjeras mencionadas previamente, el DS trabajó de manera regular con el Departamento de Ciencia Política de la Universidad de Belo Horizonte, el Departamento de Ciencia Política de la Universidad Federal de Minas Gerais, el Institute for Training and Research de las Naciones Unidas y el Instituto de Sociología de la Universidad de Zürich, entre otros. Este último era el lugar de pertenencia de Peter Heintz, el primer director del DS; si bien a futuro la FB apuntaba a nombrar un director con dedicación exclusiva radicado en Bariloche, en los primeros años de la institución se optó por la contratación de un "experto de nivel internacional" que pudiese ayudar a la proyección internacional del DS. La colaboración con la Universidad de Zürich implicó también que el Boletín en el que se publicaban las investigaciones del DS fuera coeditado por ambas instituciones.

Buena parte de estas colaboraciones giraban en torno a distintas iniciativas de recopilación de datos censales sobre la sociedad argentina y latinoamericana. De hecho, en estos años el DS funcionó como sede conjunta de la secretaría coordinadora de la Comisión de Archivo Latinoamericano de Datos, perteneciente al Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales.[12] Pero el DS mantuvo también una política similar para la recopilación de información estadística específica de las provincias argentinas, apuntada principalmente a ser utilizada como insumo para la elaboración de políticas públicas a nivel regional y nacional. Así, en 1970 se publicaba el primer volumen de una serie titulada Datos comparativos de las provincias argentinas,[13] que buscaba aportar a la creación de un banco de datos que permitiera la intercomparabilidad de distintas variables, tanto en el ámbito nacional, como sub o supranacional.

Para este proyecto se había tomado como modelo el World Handbook of Political and Social Indicators, de la Universidad de Yale.[14] Los investigadores del DS obtuvieron la información en bruto de los censos de 1947 y 1960, de estadísticas elaboradas por las Fuerzas Armadas, de censos agropecuarios, encuestas industriales, informes demográficos oficiales, datos del Consejo Nacional de Desarrollo (CONADE) y de los Ministerios de Hacienda, Salud y Educación. A partir de estas informaciones se elaboró un conjunto de 152 indicadores que incluyen tanto valores estáticos para años determinados como también tasas de crecimiento o cambio en el tiempo, y que se corresponden, para las 24 provincias argentinas, con las siguientes dimensiones: Superficie y Población, Migraciones (internas y externas), Urbanización, Educación, Salud, Comunicaciones (principalmente, los kilómetros de vías férreas presentes en cada distrito), Estructura Ocupacional, Economía, Régimen de la Tierra, Política Pública, Comportamiento Electoral, y Religión.[15]

Aunque desde un primer momento se abrió a la consulta pública, esta compilación fue ideada principalmente como un recurso para las propias investigaciones del DS. Y como resulta evidente por la variedad de las dimensiones tomadas en cuenta, dichas investigaciones prestaron especial atención a la interrelación entre fenómenos del orden de lo social, político, económico y cultural, aproximándose a la problemática del desarrollo desde una perspectiva multicausal. Para avanzar en este sentido, el DS estableció explícitamente que su actividad se apoyaría en el trabajo en equipos multidisciplinares, que reunieron expertos de diversas ramas de las ciencias sociales, y aún externos. En este sentido, tuvo una participación central el Centro de Cómputo del Programa de Matemática de la FB, que contaba con "un grupo de matemáticos espontáneamente inclinados hacia las ciencias sociales"[16]  y que resultaría central para la construcción de modelos por parte del DS.

Es significativo, además, que estas iniciativas se estaban llevando adelante en un momento en el que, a nivel nacional, se experimentaba una retracción y una crisis del "Estado potente", organizador de la sociedad, promotor del progreso económico y garante de cierto orden político (Romero, 2004:19-22). Para 1970 el Estado nacional tenía ya varias décadas de experiencia en términos de planificación socio-económica, que iba desde el Consejo Nacional de Posguerra al CONADE, pasando por los Planes Quinquenales del primer peronismo y el Consejo Federal de Inversiones (CFI) del desarrollismo. Pero el estallido del Cordobazo en 1969 había puesto en crisis la capacidad del Estado para intervenir en el desarrollo económico y la reestructuración de los lazos sociales en el territorio, en parte por su propia debilidad financiera y en parte por su pérdida de legitimidad en el seno de una sociedad en pleno proceso de radicalización (González Bollo, 2014-2015:119-120). Es decir que la intervención del DS se estaba llevando adelante en un momento en el que las formas tradicionales de la planificación, centradas en el Estado-Nación, estaban siendo discutidas tanto para la Argentina como, por causas similares, para el resto de Latinoamérica.

El desafío del desarrollo en sus múltiples escalas

El Modelo Mundial Latinoamericano (MML) es, seguramente, el estudio más reconocido de la FB a nivel internacional.[17] Pero la perspectiva que el MML adopta en relación a la posición de Latinoamérica y los países subdesarrollados dentro del sistema internacional no fue en sí misma una innovación en relación a la trayectoria previa de la Fundación, sino más bien la heredera de una serie de estudios que analizaron y problematizaron las formas de la desigualdad en el sistema internacional en el período aquí estudiado. Peter Heintz, director del DS, jerarquizó la temática y le otorgó un lugar de preeminencia dentro de sus propias investigaciones. En 1967 publicaba (en inglés) un trabajo en el que se analiza la estratificación entre naciones latinoamericanas en relación a caracterizaciones comunes a otros casos internacionales. Así es que construyen cinco grandes grupos de naciones según sus niveles de desarrollo socio-económico: Communist Society (Cuba, en el caso latinoamericano); Traditional Feudal Society (por ejemplo, Ecuador, El Salvador y Guatemala); Mobilization System Society (México y Bolivia); Modernizing Sectionalist Society (Colombia), y Modern Industrial Society. Para este último grupo sólo habría casos límite ("borderline"), que a su vez se moverían políticamente entre dos extremos: la conformidad con las reglas del comercio y la ayuda internacional, como en el caso de Brasil, y la renovación de los sistemas de movilización, como en el caso de Chile; mientras que la Argentina estaría "aún indecisa" entre estas dos opciones.[18]

Los criterios para esta modelización giran en torno a variables económicas como el PBI per cápita, pero también a otras de carácter cultural/étnico o socio-político, como las formas de diferenciación y articulación dentro de cada sociedad: horizontal y basada en asociaciones y partidos en las sociedades más desarrolladas, o vertical y basadas en instituciones y jerarquías rígidas para aquellas sociedades caracterizadas como "feudales". De todas maneras, en este artículo nos interesa menos evaluar en detalle estas caracterizaciones, que observar la vocación de las investigaciones del DS por pensar Latinoamérica como una región de estructuras divergentes y que incluye en su interior casi toda la diversidad de la estratificación internacional. Es decir, la posibilidad de analizar el caso cubano a partir de la experiencia de los países del bloque soviético, a México comparado con Turquía, Venezuela con Sudáfrica, etc.

Un año más tarde Heintz publicaba otro trabajo que avanzaba en el mismo sentido, pero abriendo de una manera mucho más ambiciosa el “juego de escalas”[19] que caracterizaría los estudios del DS en la época. Así, en Análisis comparativos de contextos latinoamericanos el autor propone un modelo matemático que, tomando como base el ingreso per cápita y su tasa de crecimiento, divide en dos grupos (alto/desarrollado y bajo/subdesarrollado) tanto a los países latinoamericanos como a las provincias argentinas e incluso a los departamentos de la provincia de Tucumán, todos ellos comparados con países externos a la región. El mismo modelo buscaba calcular, además, el nivel de conflicto y "racionalidad política" observable en cada caso.[20] La vocación por observar las problemáticas del desarrollo en sus diversas escalas permite, así, observar cómo los sistemas internacionales de estratificación son reproducidos al interior de los propios países en vías de desarrollo hasta en sus unidades más pequeñas. Esta articulación entre escalas diversas fue una "estrategia de acción" explícita del DS, que incluso tenía proyectado a futuro el estudio de estas formas de estratificación al interior de diversas organizaciones sociales y aún de los propios grupos familiares.[21]

La articulación de escalas en el estudio del desarrollo será retomada un año después por Nilda Sito y Manuel Mora y Araujo, en un estudio sobre la posición de la Argentina en el sistema internacional, y sobre las causas y consecuencias de este posicionamiento en términos de su estructura socio-económica interna. La Argentina sería, en este sentido, un caso particular, dado que sus niveles de desarrollo la ubicarían en el grupo de países pertenecientes a "Occidente" antes que a América Latina o aún al grupo caracterizado como "Latinos semidesarrollados", mientras que a la vez muestran un nivel de "estancamiento" frente a las posiciones y aspiraciones del siglo XIX: "Esta desviación estadística de la Argentina puede interpretarse en el sentido de que el país ha tomado la delantera en su 'occidentalización' respecto a otros países latinos de industrialización tardía, pero sin haber dejado de mantener otros rasgos más propios de ese grupo de países [latinoamericanos]", particularmente una baja densidad de población, una muy baja población agrícola y un alto grado de desigualdad en la distribución de la tierra.[22] La solución a este problema vendría justamente de la elaboración de "instrumentos de desarrollo regional" que permitan una reversión de la política de centralización y autarquía económica.[23]

Por su parte, la atención prestada al caso específico de la provincia de Tucumán en el trabajo de Heintz también marcó una línea de trabajo para otras investigaciones del DS. En Análisis factorial de los departamentos de Tucumán se analiza y compara entre distintas localidades la rigidez de la estructura social de la provincia, tomando como variables el nivel de urbanización, de educación, ingreso, concentración de población joven, de población joven de baja educación, de masculinización e incluso de "radicalización de la clase baja".[24] La elección del caso de Tucumán, no comprendido entre los principales programas de investigación del DS, que priorizaban a Santiago del Estero como ejemplo más claro de provincia emisora neta de migrantes y de subdesarrollo estructural,[25] responde directamente a la coyuntura política de la época. Es decir, al ciclo de protestas que se sucedieron en Tucumán entre 1965 y 1969, en noviembre de 1970 y en junio de 1972 (los llamados "tucumanazos").[26] Un año después de la publicación de Heintz, otro trabajo del DS retomaba esta investigación, con financiamiento del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y sumando datos de los censos nacionales, del Centro de Investigaciones Económicas del Instituto Torcuato Di Tella y del CFI. En el mismo, esta importancia del caso tucumano se hace explícita: "Escogimos la provincia de Tucumán por el valor histórico de haber sido el primer centro del desarrollo argentino hasta el siglo XVIII, y por el hecho actual de ser el punto de mayor concentración de tensiones sociales no resueltas".[27]

Por último, resulta interesante destacar que el análisis de la estratificación, sea nacional o internacional, es comprendido y abordado como un problema complejo, que rechaza cualquier tipo de determinismo puramente económico. En los trabajos citados previamente esto se demuestra en la atención prestada a las facetas estrictamente políticas de los casos estudiados. En el artículo Imágenes de estratificación internacional en Latinoamérica, el análisis pone el foco en una variable novedosa: la "percepción" de los propios latinoamericanos sobre la estratificación en y entre sus países. Para ello se trabajó con una encuesta realizada a 327 estudiantes latinoamericanos de ciencias sociales y un grupo de control de 21 estudiantes noruegos, parte del Programa 21. La estructura de la comunidad mundial, desarrollado por el International Peace Institute de Oslo. Los entrevistados pertenecían a las distintas sedes de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), la Universidad Católica de Chile y la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Minas Gerais, y aunque se reconoce que las conclusiones de este estudio no podrían ser generalizadas al conjunto de las sociedades latinoamericanas, el mismo sirve para ensayar una primera aproximación a la identificación subjetiva entre prestigio/importancia y desarrollo/industrialización de cada país.[28]

De esta manera, se reconoce que el desarrollo es, al menos en parte, un valor social, y que las posibilidades de acción a nivel nacional o regional (la "marcha hacia la integración regional", por ejemplo) dependen en buena medida de una toma de conciencia de la distancia entre realidades y percepciones, y de la "falta de interacciones igualitarias entre los países del sistema".[29] Volviendo sobre la importancia del trabajo sobre diversas escalas interconectadas, los autores justificaban la relevancia de un estudio de estas características de la siguiente manera:

"A nivel nacional, la estructura de la estratificación influye sobre la psicología y la conducta individuales, sobre las pautas de interacción entre individuos, y sobre la dinámica del sistema nacional como un todo. De la misma manera, para el sistema internacional la estratificación de países tiene sus consecuencias para la dinámica de los procesos nacionales, las pautas de interacción entre países y para la dinámica del sistema interamericano como tal". [30]

Estos análisis centrados en las percepciones sociales propias de los actores latinoamericanos son una muestra más de la vocación de las investigaciones del DS por una “estrategia de acción” atenta a la interacción entre diversas escalas de observación. Así, el juego de escalas presente en estos programas de investigación permite a los estudios del DS abordar la problemática del desarrollo regional en toda su complejidad, sin extrapolar las conclusiones extraídas en un nivel de análisis macro a la realidad social de un departamento tucumano o santiagueño, o viceversa. Y a la vez, esta operación habilita un estudio de las dinámicas sociales de dichos espacios en toda su complejidad, especialmente para aquellos fenómenos que, como las migraciones, suponen en sí mismas una tensión y un pasaje entre lo local y lo nacional o global.

Las migraciones como causa y consecuencia del subdesarrollo

El estudio de las migraciones fue una temática central al programa del DS, y otro ámbito en el que es posible observar el trabajo multidisciplinar de sus investigadores. Por supuesto, las investigaciones sobre el fenómeno migratorio no eran una particularidad de la FB. En esa misma época la Sociología de las Migraciones se constituía como una especialidad en los centros científicos de Estados Unidos, Europa y América Latina (Domenech y Gil Araujo, 2016), mientras que en la propia Argentina ya circulaban trabajos como Política y sociedad en una época de transición, de Gino Germani,[31] que retomando también las temáticas de la planificación en democracia de Mannheim[32] y las preocupaciones por el desarrollo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, tendrían un papel central en la institucionalización y profesionalización de la disciplina sociológica en el país (Blanco, 2006). La producción del DS puede comprenderse, entonces, como un aporte más a este proceso y como otra voz que se sumaba a este debate.

Nilda Sito, por ejemplo, dialogaba explícitamente con Gino Germani en su investigación sobre la correlación entre las tasas de crecimiento poblacional y las tasas de desarrollo de las provincias argentinas.[33] Allí coincide con la tesis germaniana referida a la "sobreurbanización" de América Latina y la concentración urbana entendida como estrategia de una concentración de recursos que facilitaría el crecimiento económico (política necesaria dada la baja densidad de población), pero a partir de modelos matemáticos de comparación internacional concluye que "dicha política encuentra sus propios límites a partir de cierto nivel de crecimiento", que la Argentina ya habría alcanzado. Las migraciones desde el interior provincial hacia los grandes centros urbanos continuarían, sin embargo, debido a dos tipos de "condiciones contextuales": una "tensión educacional" que expresa la diferencia entre el nivel de educación y el nivel de ingreso per cápita, y una "tensión de economías rurales" que expresa la diferencia entre el desarrollo de los sectores rurales en ocupaciones no agrícolas y, nuevamente, el nivel de ingreso per cápita.[34]

Este trabajo retoma y refuerza una hipótesis que la autora ya había expresado en una producción previa,[35] esto es, que el migrante constituye un "potencial desarrollista" cuya pérdida es significativa para su antigua zona de pertenencia, aún cuando pueda favorecer el desarrollo metropolitano. Nuevamente, este potencial desarrollista no excluye la propia experiencia subjetiva de los actores, desde el momento en que el mismo es resultado de "que el individuo percibe el desequilibrio como la pauta societal dominante y refiere su problemática personal al contexto y no a características individuales o derivadas de su situación personal", pasando de remitirse a sistemas no reivindicativos e individualistas como el educacional y el urbano, a participar de organizaciones reivindicativas como sindicatos y partidos políticos.[36] De hecho, este estudio fue realizado a partir del testimonio de 60 obreros entrerrianos, con un cuestionario apuntado a la relevancia que ellos adjudicaban a su contexto societal, al regionalismo como ideología desarrollista y a la participación obrera como forma de acción colectiva.

Rubén Kaztman, por su parte, retoma la idea de que todo aumento en la tasa de educación que no es igualado por un aumento similar en puestos de trabajo "de clase media" redunda en el surgimiento de "ideologías anti-status quo".[37] Para ello, se apoya tanto en las investigaciones previas de Heintz como en las de Torcuato Di Tella,[38] y trabaja el caso de las provincias argentinas a partir de los datos obtenidos de los censos de 1914 y 1947. A partir de esta comparación interprovincial llega a la conclusión de que en determinadas regiones "atímicas" (principalmente el NOA) las clases medias tienden a mantener su posición de clase a través de la educación dado que no existirían "jerarquías de status" alternativas que compitan con las jerarquías educativas.[39] De esta manera busca demostrar cómo la educación no es necesariamente, en sí misma, una herramienta para el ascenso y/o la transformación social, sino que en determinados contextos societales puede ser utilizada, por el contrario, para la "preservación de estructuras tradicionales" y un aumento de la burocratización.[40] En opinión del autor, ésta sería una de las grandes diferencias en la función de la educación entre "viejos" y "nuevos" países subdesarrollados: en los "nuevos países africanos" la educación sería una nueva vía para la movilidad social ascendente en competencia con los antiguos criterios de prestigio, conduciendo así a cambios en la estructura social existente; en los países latinoamericanos, en cambio, la educación "es mucho más vieja y coincide frecuentemente con las primeras manifestaciones de formas societales estructuradas" y tendría, por lo tanto, "funciones claramente definidas dentro del sistema tradicional de poder y prestigio".[41]

Esta comparación entre Latinoamérica y el caso africano es extendida también al impacto que en cada sociedad tendrían los medios de comunicación de masas: capaces de una rápida difusión de los valores extranjeros que caracterizan a las sociedades más desarrolladas, en el caso de África, y de difusión más lenta entre los países latinoamericanos, donde estos discursos y valores deben competir con un sistema educacional preexistente y relativamente independiente de los modelos extranjeros. Y esto se realiza, nuevamente, retomando algunas de las líneas fundamentales de un trabajo previo de Peter Heintz, titulado Educación, comunicación de masa y movilidad social en las áreas rurales de América Latina.[42] El artículo se basa en una serie de estudios realizados por el autor en la sede de FLACSO de Santiago, Chile, y busca observar, justamente, la relación existente entre estos tres factores: educación, medios de masas y movilización social de la población rural latinoamericana. Su conclusión es que, a diferencia de la educación y los lazos sociales o de amistad, que elevan la empatía del individuo, la participación en los medios de comunicación de masas puede reemplazar la participación simbólica en lo social, especialmente entre personas jóvenes con bajo nivel educacional. Esto ocurre en la medida en que "el mundo imaginario" que proporcionan los medios de comunicación" aislarían efectivamente a los individuos, impidiéndoles una "participación simbólica o efectiva en el mundo real".[43]

Este artículo vuelve, así, sobre el problema de la anomia[44] y de sus consecuencias sobre el cuerpo social, la principal de ellas siendo la emigración. Pero si en los trabajos citados previamente, ésta es pensada centralmente como un movimiento inter-provincial, en el último estudio que presentaremos Nilda Sito y Luis Stuhlman analizan el caso específico de la emigración de científicos de la Argentina.[45] El trabajo consta de dos partes: una apuntada a señalar los determinantes estructurales de la emigración de científicos y una segunda de análisis de las respuestas a un cuestionario realizado por Lázaro Gerschenson y Romano Piras y enviado a miembros de la Carrera del Investigador del CONICET. Así, si bien los autores parten del reconocimiento del "potencial desarrollista" que se pierde con cada científico que emigra (para cuya formación los países latinoamericanos habrán invertido entre 20 y 25.000 dólares, y cuya inversión es luego capitalizada por el país receptor), señalan una multiplicidad de causas que explicarían el fenómeno.

Por ejemplo, recurren a la sociología de las organizaciones (si bien advierten por el muy pobre desarrollo del campo) para señalar los problemas relacionados con el proceso de institucionalización de la ciencia.[46] También encuentran que "estudiar fuera del país aumenta la probabilidad de migración" y que "el lugar donde se cursaron estudios de post-grado guarda estrecha relación con el destino migratorio de los profesionales".[47] Y rechazan la idea presente en otros autores de la anomia individual como explicación de la estrategia de emigración: por el contrario, aislado del contexto político, económico y social nacional, el "subsistema académico" absorbería las tensiones y anomias individuales, surgiendo en su reemplazo la "anomia interinstitucional"[48]:

 

"Para los que trabajan en un contexto desarrollado las obligaciones institucionales están bien definidas y constituyen un conjunto integrado que incluye estar al día en la disciplina y contribuir a su desarrollo a través de la investigación y la docencia. (...) Para los que trabajan en un contexto en vías de desarrollo en cambio, estas obligaciones no están tan claramente definidas y aparecen poco integradas entre sí, por ejemplo, dedicarse a la docencia no implica estar al día en la disciplina, etc.".[49] 

Conclusión y comentarios finales

En las páginas previas se han buscado presentar y describir, muy sumariamente, algunas de las principales características del proyecto intelectual del DS entre 1967 y 1973. Sus conexiones nacionales e internacionales, su foco en el trabajo interdisciplinar, su atención al juego de escalas y la prioridad otorgada en sus investigaciones a las temáticas del desarrollo regional, las migraciones, la educación y los medios de comunicación de masas muestran la complejidad de la perspectiva de esta institución en su intervención en los debates de la sociología de la época. Si bien en esta primera aproximación al tema no ha sido posible reconstruir críticamente cada artículo citado y contraponerlo con otras investigaciones contemporáneas, este primer acercamiento, de carácter exploratorio, se ha pensado como una forma de habilitar futuras investigaciones que aborden el tema en mayor profundidad. Una recuperación semejante de la producción del DS permitiría enriquecer las discusiones en torno a los proyectos latinoamericanos de los "largos sesenta", sumando a la historia intelectual de dicha época (así como a la historia de las ciencias sociales en Argentina de más largo plazo) la perspectiva de una institución tan particular y destacada como fue la FB.

Otra línea de análisis que queda pendiente de mayor profundización es la relativa a la reconstrucción de las trayectorias intelectuales de los investigadores que fueron parte del DS. Entre ellas destacan las figuras de Peter Heintz, Manuel Mora y Araujo y otros investigadores e investigadoras que fueron centrales en la construcción de los programas de investigación de la institución y parte de un desarrollo mayor de las ciencias sociales a nivel nacional y latinoamericano. Rastrear y reconstruir la actuación profesional de estos intelectuales permitiría incluso trazar líneas de continuidad para estas discusiones más allá del año 1973, e incluso de 1977, año en el cual la gran mayoría de los programas aquí mencionados debieron ser cerrados, junto con buena parte de la actividad de la FB.

Pero más allá de estas limitaciones, el presente artículo ha buscado reconstruir la especificidad de la intervención del DS en los debates de la sociología del desarrollo de su época. Una intervención caracterizada por análisis basados en el trabajo multidisciplinario, apoyados en la construcción de información censal y atentos a la multicausalidad de los fenómenos sociales. Su participación en el largo debate sobre las migraciones da cuenta de estas características, mostrando cómo dicho fenómeno es abordado, no como simple consecuencia de factores económicos relacionados a la estructura productiva, sino como el resultado de una interacción compleja de un número de variables que incluye las estructuras ideológicas y de ascenso social, la educación y el consumo de medios masivos de comunicación, la creación de lazos sociales de empatía y solidaridad, etc. El “juego de escalas” utilizado por estas investigaciones, por su parte, les permite poner en diálogo las experiencias de lo local, lo provincial, lo nacional y lo regional, y dar cuenta de la complejidad del fenómeno a través de una metodología de trabajo que tendrá un productivo desarrollo posterior dentro de las ciencias sociales.

Bibliografía

Altamirano, Carlos (2013). Intelectuales. Notas de investigación sobre una tribu inquieta. Buenos Aires: Siglo Veintiuno.

Ansaldi, Waldo (2014). Entre perplejidades y angustias, notas para pensar las ciencias sociales latinoamericanas. Revista de Estudos & Pesquisas sobre as Américas, vol. 8, N° 2, pp. 15-38.

Bianculli, Karina y Vercelli, Ariel (coordinadores del Dossier) (2019). Aportes teórico-metodológicos a los estudios de la ciencia y la tecnología en la historia argentina (siglos XX y XXI). Pasado Abierto. Revista del CEHis, Vol. 5, N° 10, pp. 2-177.

Blanco, Alejandro (2006). Razón y modernidad: Gino Germani y la sociología en Argentina. Buenos Aires: Siglo XXI.

Bohoslavsky, Ernesto (2015). El rostro humano de la historia del Estado. Estudios Sociales del Estado. Vol. 1, N° 1, pp. 239-247.

Bozza, Juan Alberto (2014). ¿Intelectuales para la contrainsurgencia? Camelot: investigación social y anticomunismo en Chile en los años sesenta. Ponencia presentada en las VII Jornadas de Trabajo sobre Historia Reciente. Universidad Nacional de La Plata.

Califa, Juan Sebastián (2011). El movimiento estudiantil reformista contra el Plan CAFADE. Cientificismo, imperialismo, reestructuración universitaria y lucha política (1959-1960). Revista Redes, Vol. 17, N° 32, pp. 161-184.

Comastri, Hernán (2014). Redes académicas transnacionales y la física argentina durante el primer peronismo. Si Somos Americanos. Revista de Estudios Transfronterizos. Universidad Arturo Prat del Estado de Chile, Vol. XIV, Nº 1, pp. 75-100.

Di Liscia, María Silvia y Soprano, Germán (Comps.) (2017). Burocracias estatales. Problemas, enfoques y estudios de caso en la Argentina (entre fines del siglo XIX y XX). Rosario: Prohistoria Ediciones y UNLPAM.

Di Tella, Torcuato (1965). Teoría del Primer Impacto del Crecimiento Económico. Santa Fe: Universidad Nacional del Litoral.

Domenech, Eduardo y Gil Araujo, Sandra (2016). La Sociología de las Migraciones: una breve historia. Espacio Abierto, Vol. 25, Nº 4. Recuperado de https://www.redalyc.org/jatsRepo/122/12249087013/html/index.html. Consultado: 20 de febrero de 2020.

Feld, Adriana (2015). Ciencia y poítica(s) en la Argentina, 1943-1983. Bernal: Universidad Nacional de Quilmes Editorial.

González Bollo, Hernán (2014-2015). Introducción al Dossier: Exploraciones sobre la Argentina planificada (1944-1972). Anuario IEHS, Vol. 29 y 30, pp. 119-124.

Hurtado de Mendoza, Diego (2010). La ciencia argentina. Un proyecto inconcluso: 1930-2000. Buenos Aires: Edhasa.

Neiburg, Federico y Plotkin, Mariano (Comps.) (2004). Intelectuales y expertos. La constitución del conocimiento social en Argentina. Buenos Aires: Paidós.

Plotkin, Mariano y Zimmermann, Eduardo (Comps.) (2012). Los saberes del Estado. Buenos Aires: Edhasa.

Pryluka, Pablo y Ramiro Coviello (2018). Consumo y desarrollo en el tercer gobierno peronista. América Latina en la Historia Económica, Año 25, Nº 1, pp. 98-135.

Ramírez, Ana Julia (2008). Tucumán 1965-1969: movimiento azucarero y radicalización política. Nuevo mundo. Mundos nuevos. Recuperado de https://journals.openedition.org/nuevomundo/38892. Consultado: 20 de febrero de 2020.

Revel, Jacques (2015 [1996]) (Dir.). Juego de escalas. Experiencias de microanálisis. San Martín: UNSAM EDITA.

Romero, Luis Alberto (2004). La crisis argentina. Una mirada al siglo XX. Buenos Aires: Siglo XXI.

Suasnábar, Claudio (2004). Universidad e intelectuales, educación y política en la Argentina (1955-1976). Buenos Aires: Flacso/Manantial.

Hernán Comastri. Es Licenciado y Doctor en Historia por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Actualmente se desempeña como docente en dicha universidad, así como en la Universidad Torcuato Di Tella y realiza tareas de investigación en el Instituto de Historia Argentina y Americana "Dr. Emilio Ravignani" (UBA/CONICET). Su tesis de doctorado se focalizó en los imaginarios científicos de las clases populares durante el primer peronismo. Actualmente, sus principales líneas de investigación refieren a la historia social y cultural de las ciencias en la Argentina de la segunda mitad del siglo XX.

Pasado Abierto, Facultad de Humanidades, UNMDP se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial 4.0 Internacional.


[1] Los materiales con que cuenta la biblioteca del FB incluyen libros, las publicaciones periódicas de la FB Desarrollo y Energía, Revista Patagónica de Filosofía y Boletín Bibliográfico – Economía de la Energía en América Latina, publicaciones surgidas de los programas (aún en curso) de Calidad de Vida, Energía, Filosofía y Medio Ambiente, publicaciones del Centro de Estudios del Desarrollo Humano y Social y el Grupo de Análisis de Sistemas Ecológicos (asociados a la FB entre 1978 y 1986, y entre 1978 y 1991, respectivamente), y finalmente, los trabajos publicados entre 1963 y 1977 por los distintos Departamentos de la FB: Biología, Matemáticas, Programa de Transferencia, Recursos Naturales y Energía y Ciencias Sociales (este último conteniendo las publicaciones del DS que serán analizadas en el presente artículo).

[2] Otras líneas de investigación presentes en el fondo documental del DS, que no han podido ser abordadas aquí, incluyen discusiones sobre el Modelo Latinoamericano y otras formas de modelización y simulación aplicadas a la sociología, la “socialización de niños de clase baja” y la construcción de variables educacionales y ocupacionales, las “tensiones estructurales” de las economías latinoamericanas y los conflictos “anti-status quo” en la región, discusiones teórico-metodológicas propias del campo sociológico, y estudios comparativos de las estructuras partidarias, sindicales e ideológicas de la Argentina y Latinoamérica, entre otras.

[3] Gallopín, Gilberto, Carlos Mallmann, Carlos Suárez, Marisa Arienza, Jorge Sábato y Eduardo Tiscornia (1981). An Institution in a Turbulent Enviroment: the Fundación Bariloche. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 2. Este corte coincide, además, con el retorno del peronismo al poder en mayo de 1973, hecho que marcaría un cambio en el carácter de muchas de las discusiones intelectuales y las líneas de investigación que se venían desarrollando desde la década del sesenta. Otras investigaciones han avanzado ya sobre algunos aspectos de esta relación entre la producción de la FB y las políticas de Estado impulsadas por el tercer peronismo. Ver, a modo de ejemplo: Pryluka y Coviello (2018).

[4] El dossier coordinado por Bianculli y Vercelli incluye trabajos de Hurtado, Souza, Carnota, Vianna, Feld, Lalouf, Thomas, Becerra, Bidinost y Spivak L´Hoste, y ofrece un excelente panorama de las investigaciones actuales en el área de los estudios sobre ciencia y tecnología en Argentina y Latinoamérica.

[5] Gallopín, Gilberto, Carlos Mallmann, Carlos Suárez, Marisa Arienza, Jorge Sábato y Eduardo Tiscornia (1981). An Institution in a Turbulent Enviroment: the Fundación Bariloche. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 13-14.

[6] Fundación Bariloche (1970). El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Su estructura y programas. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 11. Para dar respuesta específica a este problema, el DS llevó adelante programas de formación de investigadores, de formación de graduados, de renovación de conocimientos y de promoción de estadías en centros académicos extranjeros.

[7] Fundación Bariloche (1969). El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Evaluación de lo realizado y perspectivas futuras. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 1.

[8] Como ejemplo de estas investigaciones realizadas "a demanda" podría mencionarse, por ejemplo, la colaboración con la Dirección Nacional de Parques Nacionales sobre el "rol social del turista de los parques". Fundación Bariloche (1969). El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Evaluación de lo realizado y perspectivas futuras. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 5.

[9] Fundación Bariloche (1969). El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Evaluación de lo realizado y perspectivas futuras. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 1-3.

[10] Dadas las limitaciones de espacio, en esta primera aproximación al DS no nos será posible dar cuenta de la trayectoria profesional de cada uno de los investigadores e investigadoras que participaron de estos proyectos.

[11] Fundación Bariloche (1970). El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Su estructura y programas. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 2, 21 y 25.

[12] Fundación Bariloche (1970). El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Su estructura y programas. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 9.

[13] Fundación Bariloche (1970). Datos comparativos de las provincias argentinas. Bariloche: Fundación Bariloche.

[14] Russett, Bruce (1964). World Handbook of Political and Social Indicators. New Haven: Yale University Press.

[15] Fundación Bariloche (1970). Datos comparativos de las provincias argentinas. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 8-16.

[16]  Fundación Bariloche (1970). El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Su estructura y programas. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 10.

[17] El mismo fue llevado adelante entre 1972 y 1975 como una respuesta al modelo del Massachussetts Institute of Technology titulado World III (y luego publicado como Los límites del crecimiento) que señalaba la necesidad de paralizar el crecimiento económico y poblacional como única respuesta a la acelerada degradación del ecosistema global. El MML, en cambio, argumenta que los límites al crecimiento analizados en el modelo World III no deben ser naturalizados, sino que para superarlos resulta esencial poner el foco en las desigualdades del sistema internacional, corriendo la atención del problema de la sobrepoblación al del sobreconsumo de los países desarrollados.

[18] Heintz, Peter (1967). The Place of Latin American Societies in the International Stratification System. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 1-20.

[19] Lejos de abordar lo local como el espacio de la excepción y lo específico, la noción de “juego de escalas” supone que la escala de observación es, en sí misma, una de las variables de la experimentación, en tanto la elección de una escala de observación particular (y más aún, la variación de dicha escala) tiene un efecto sobre la construcción de conocimiento. Así, esta perspectiva de análisis no se reduce a la oposición entre “lo grande y lo pequeño”, sino que parte de reconocer que una realidad social no es la misma cuando es observada desde distintos niveles de análisis, y que es este “principio de variación de escalas” (o juego de escalas) el que posibilita la construcción de objetos complejos, así como el abordaje de la estructura estratificada de lo social (Revel, 2015 [1996]:16).

[20] Heintz, Peter (1968). Análisis comparativo de contextos latinoamericanos. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 1-43.

[21] Fundación Bariloche. El Departamento de Sociología de la Fundación Bariloche. Evaluación de lo realizado y perspectivas futuras. Bariloche: Fundación Bariloche, 1969, p. 4.

[22] Sito, Nilda y Manuel Mora y Araujo (1969). Un ensayo comparativo sobre la posición de la Argentina en el sistema internacional. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 9.

[23] Sito, Nilda y Mora y Araujo, Manuel (1969). Un ensayo comparativo sobre la posición de la Argentina en el sistema internacional. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 30.

[24] Hernández, Raúl y Peter Heintz (1968). Análisis factorial de los departamentos de Tucumán. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 42-53.

[25] Mora y Araujo, M. y Schnitman, Jorge (1971). Estudio y asesoramiento en desarrollo de comunidades y asistencia social en la provincia de Santiago del Estero. Bariloche: Fundación Bariloche, 1971; Mora y Araujo, Manuel, Rodríguez Conrad, Susana y Hadis, Benjamín (1972). Elaboración de métodos de acción para el desarrollo de áreas con énfasis en el estudio de causas y soluciones al problema de la desocupación de la provincia de Santiago del Estero. Bariloche: Fundación Bariloche; Vessuri, Hilda. (1973). La actividad socioeconómica en los Departamentos Figueroa y Moreno, Provincia de Santiago del Estero. Bariloche: Fundación Bariloche.; Alen Lascano, Luis Celestino (1973). Desarrollo Histórico Socioeconómico de la Provincia de Santiago del Estero. Bariloche: Fundación Bariloche.

[26] En este punto no podremos detenernos a analizar en detalle las causas y consecuencias específicas del ciclo de protestas en Tucumán. Para más detalles sobre el mismo ver: Ramírez, 2008.

[27] Hernández, Raúl (1969). Modelo de crecimiento de la provincia de Tucumán. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 1.

[28] Schwartzman, Simón y Mora y Araujo, Manuel (1966). Imágenes de estratificación internacional en Latinoamérica. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 185.

[29] Schwartzman, Simón y Mora y Araujo, Manuel (1966). Imágenes de estratificación internacional en Latinoamérica. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 182.

[30] Schwartzman, Simón y Mora y Araujo, Manuel (1966). Imágenes de estratificación internacional en Latinoamérica. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 182.

[31] Germani, Gino (1962). Política y sociedad en una época de transición: de la sociedad tradicional a la sociedad de masas. Buenos Aires: Paidós.

[32] Mannheim, Karl (1950). Freedom, Power and Democratic Planning. Nueva York: Oxford University Press.

[33] Sito, Nilda (1969). La pérdida de población de las provincias argentinas y los mecanismos de identificación regional. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 1-17.

[34] Sito, Nilda (1969). La pérdida de población de las provincias argentinas y los mecanismos de identificación regional. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 2-4

[35] Sito, Nilda (1968). Consecuencias del proceso de migraciones internas en el plano ideológico. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 1-40.

[36] Sito, Nilda (1968). Consecuencias del proceso de migraciones internas en el plano ideológico. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 5-8.

[37] Kaztman, Rubén (1970). Estratificación educacional en las provincias argentinas. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 1-39.

[38] Di Tella, Torcuato (1965). Teoría del Primer Impacto del Crecimiento Económico. Santa Fe: Universidad Nacional del Litoral.

[39] Kaztman, Rubén (1970). Estratificación educacional en las provincias argentinas. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 15.

[40] Kaztman, Rubén (1970). Estratificación educacional en las provincias argentinas. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 12 y 25.

[41] Kaztman, Rubén (1970). Estratificación educacional en las provincias argentinas. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 2-3.

[42] Heintz, Peter (1968). Educación, comunicación de masa y movilidad social en las áreas rurales de América Latina. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 399-415.

[43] Heintz, Peter (1968). Educación, comunicación de masa y movilidad social en las áreas rurales de América Latina. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 407

[44] Entendida como la falta de normas o la incapacidad de la estructura social de proveer a ciertos individuos de lo que necesitan para lograr las metas que la misma sociedad ha fijado para ellos.

[45] Sito, Nilda y Luis Stuhlman (1970). La emigración de científicos de la Argentina. Bariloche: Fundación Bariloche, pp. 1-57.

[46] Sito, Nilda y Luis Stuhlman (1970). La emigración de científicos de la Argentina. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 15

[47] Sito, Nilda y Luis Stuhlman (1970). La emigración de científicos de la Argentina. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 16 En años posteriores, otras investigaciones volverán sobre este problema, buscando construir indicadores útiles para la medición de las capacidades y recursos humanos existentes en el área científica y tecnológica. Mora y Araujo, M. (1973). Ciencia y Tecnología. Indicadores Sociales. Bariloche: Fundación Bariloche.

[48] Sito, Nilda y Luis Stuhlman (1970). La emigración de científicos de la Argentina. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 23.

[49] Sito, Nilda y Luis Stuhlman (1970). La emigración de científicos de la Argentina. Bariloche: Fundación Bariloche, p. 17.

Enlaces refback

  • No hay ningún enlace refback.



Copyright (c) 2020 Pasado Abierto

Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial 4.0 Internacional.



Pasado abierto
 es una revista del Centro de Estudios Históricos (CEHis) de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
Correo electrónico: pasado.abierto@gmail.com | Web: http://fh.mdp.edu.ar/revistas/index.php/pasadoabierto

ISSN 2451-6961 (en línea)

Licencia Creative Commons se encuentra bajo Licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional

Revista Incluida en: 

ROAD https://portal.issn.org/resource/ISSN/2451-6961

LatinREV https://latinrev.flacso.org.ar/mapa

Latindex Directorio https://www.latindex.org/latindex/ficha?folio=26011

Google Académico Link

BASE (Bielefeld Academic Search Engine) Link
Latinoamericana(Asociación de Revistas Académicas de Humanidades y Ciencias Sociales) Link
MIAR (Matriz de Información para el Análisis de Revistas) Link
SUNCAT Link
WorldDCat Link
Actualidad Iberoamericana Link

OAJI (Open Academic Journals Index) Link

CZ3 Electronische Zeitschriftenbibliothek Link

Europub (Directory of Academic and Scientiic Journals) Link

Open Science Directory Link

EC3 metrics Link

Root Indexing Link

 

JournalsTOCs Link

Scientific Indexing Services Link

Citefactor (Directory Indexing of International Research Journals) Link

Malena Link
Evaluada por: 
Latindex Catálogo 2.0 Link
Núcleo Básico de Revistas Científicas Argentinas Link
DOAJ (Directory of Open Access Journals) Link
ERIHPLUS (European Reference Index for the Humanities and Social Sciences) Link
REDIB (Red Iberoamericana de Innovación y conocimiento Científico) Link
CIRC (Clasificación Integrada de Revistas Científicas) Link
Pasado Abierto utiliza el identificador persistente: